lunes, 31 de agosto de 2015

LA NOVELA DE REBECA de Mikel Alvira.

La novela de Rebeca

Editorial:  Ediciones B.
Fecha publicación: 2015.
Nº Páginas: 272
Precio:  17,00 €
Género: Narrativa.
Edición: Rústica con solapas.
ISBN: 978-84-666-5716-7



Autor

Mikel Alvira, inquieto creador multidisciplinar, alterna la producción literaria con las manifestaciones plásticas y la redacción de guiones.

Ha publicado varios ensayos, poemarios y novelas, entre estas últimas el best-seller El silencio de las hayas. "Soy escritor y todo cuanto hago tiene que ver con lo que escribo. Si tuviera que resumir mi perfil diría que no sé no escribir".

Sinopsis

Solo un escritor tramposo puede escribir la novela perfecta.

El autor de éxito Simón Lugar lucha por dar forma a su primera novela negra. Melancólico y misántropo, se siente presionado por su agente literaria y sus cientos de miles de lectores. Buscando la inspiración en un paseo por la playa, conoce a una joven enigmática. Mientras, una serie de sangrientos asesinatos van conformando la trama del libro dentro de su cabeza. 

[Biografía y sinopsis tomadas directamente del ejemplar]


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¡Benditas sean las notas que voy tomando a medida que avanzo en mis lecturas! La novela de Rebeca la leí a mediados de julio y si no fuera por las anotaciones, ahora no sabría muy bien cómo componer esta reseña porque la novela de Mikel Alvira necesita de lápiz y papel para que nada se te escape. 

Nada más abrir el libro lo primero que llama la atención son las distintas grafías que emplea el autor. No tardaremos mucho en advertir que estamos ante un libro que contiene otro. Iría más lejos, un libro que contiene dos libros más en su interior, de ahí que, para distinguir uno de otro, el autor emplee distinto tipo de letra. Mikel Alvira juega con las matrioskas.

Cuando nos topamos con una novela así, ya sabéis que estamos ante un caso de metaliteratura. A todo esto, el DRAE no recoge este término y no deja de ser curioso. Pero, vayamos a lo que nos importa. Teniendo en cuenta que, como dije antes, La novela de Rebeca engloba diversas tramas, me resultaría más fácil si os hablo de este libro desgranando cada una de las líneas argumentales. A una la llamaré «Trama principal» y a la otra «Trama secundaria» aunque la asignación de estos términos dejan de tener mucho sentido cuando se llega al desenlace.


Trama principal


La trama principal, por llamarla de alguna manera, tiene como protagonista al escritor Simón Lugar, un hombre especialmente ordenado y organizado que, apartado del mundanal ruido, reside en un punto de la costa del País Vasco (sabremos esto por ciertas referencias a la Ertzaintza pero no hay un dibujo explicito del terreno en el que se desarrolla esta trama). Simón se encuentra en pleno proceso creativo, dando forma a una novela negra. Escribir, idear, inventar, construir una historia requiere de grandes dosis de concentración y múltiples horas al día de enclaustramiento frente al ordenador. Sin embargo, también se hace necesario despejar la cabeza. Simón, aprovechando la cercanía del mar, acostumbra a dar un paseo matutino durante los cuales llega a conocer a una enigmática mujer, Eme. 

Simón se sentirá en todo momento intrigado por Eme y, una vez que han acercado posturas, hará de ella su confidente. Por su parte, Eme parece jugar al suspense con Simón, de tal manera que, cuando están juntos, tenía la sensación de que algo iba a ocurrir entre ellos. Pero no os desvelaré nada. Lo que ocurra entre los dos será algo que tendréis que descubrir.

Pero a su vez, esta línea argumental se divide en otra rama muy distinta. El autor nos presenta a dos hermanas argentinas, dos bonaerenses, que parecen tener problemas legales. Han recibido citaciones, se menciona la cárcel, están pendientes de un juicio por algo que hicieron en el pasado. Asuntos turbios envuelven a las dos damas y aunque parezca increíble, ambas tienen bastante que ver con Simón. Ahí lo dejo.  

Trama secundaria


Teniendo en cuenta que Simón Lugar es escritor, la trama secundaria sería la que él estaría construyendo, su novela negra en pleno proceso creativo. 

La novela de la que es autor Simón, tiene como protagonista a Rebeca Leeman, una mujer de buena familia, empleada en una revista de decoración pero aficionada también a la literatura. Su máximo deseo es escribir una novela negra y aprovechando que su tío es médico forense, tiene acceso a información valiosísima sobre cadáveres y asesinatos, material que le viene tremendamente bien para el argumento que ella tiene pensado. Pero Rebeca es una mujer con muchas sombras, guarda muchos secretos que por supuesto no os voy a desvelar. Lo único que os puedo decir es lo siguiente. Si me pidieran que eligiera entre la trama principal y la secundaria, entre Simón Lugar y Rebeca Leeman, tengo clarísimo que me quedaría con la segunda. La historia que esta mujer protagoniza me ha resultado fascinante frente al argumento de Simón y Eme, cuya amistad tiene algún toque de fantasía que no me ha convencido, al margen de que se prevé.

Y al final llegamos a un desenlace que me ha cautivado por lo bien pensado y ejecutado.  Voy a intentar explicar qué sensaciones me ha producido el desenlace. Lo primero que se me ocurre es utilizar los trampantojos como referencia. Me refiero a esas ilusiones ópticas con las que se engaña al espectador. Por ejemplo, mirad esta imagen.




A simple vista, da la sensación de que el niño, protagonista del cuadro, harto de estar encerrado entre cuatro maderos, ha decidido abandonar su jaula particular y salir al exterior pero sabemos que no es así. Es solo una ilusión y no es de las mejores que hay pero sí la que más me ha gustado. El cuadro es tal y como lo estamos viendo y su autor solo está creando la ilusión de la fuga. 

No sé si me voy a explicar bien pero, en cierto sentido, Mikel Alvira juega con la ilusión óptica o sensorial del espectador. El autor conecta las dos historias de tal modo que provoca en nosotros una sensación de incertidumbre, de no saber realmente qué es lo real y lo ficticio. En definitiva, me haya explicado o no, os confieso que a mí el final me ganó totalmente y aplaudí la labor de Alvira por ser tan ingenioso.

viernes, 28 de agosto de 2015

MIENTRAS LLUEVA de Teresa Viejo.


Editorial:  Espasa.
Fecha publicación: junio, 2015.
Nº Páginas: 448
Precio:  19,90 €
Género: Narrativa.
Edición: Rústica con solapas.
ISBN: 978-84-670-4472-0
[Disponible en ebook;
puedes leer el primer capítulo aquí]



Autora

Teresa Viejo es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, donde también cursó estudios de Sociología. A lo largo de su carrera ha conducido toda suerte de programas en TVE, Antena 3, Canal 9 y CMTV, entre ellos Saber Vivir, 7 Días 7 Noches o Tal como somos. Comunicadora habitual  en la radio, fue la primera mujer encargada de dirigir un programa matinal (Radio España). En la actualidad dirige en RNE, La Observadora, sábados y domingos. Asumir la dirección de Interviú supuso un revulsivo en los medios de comunicación al convertirse en la primera mujer al frente de una revista de información general, donde mantiene un artículo semanal. Colaboradora habitual en prensa (The Objective), es autora de tres exitosos ensayos (Hombres, modo de empleo; Pareja, fecha de caducidad; Cómo ser mujer y trabajar con hombres) y dos novelas (La memoria del agua, traducida a cuatro idiomas y adaptada   por TVE en una miniserie; y Que el tiempo nos encuentre). Es Embajadora de Buena Voluntad de Unicef desde 2001.

Sinopsis

Sácame de aquí: esa es la frase que retumba desde la cabeza al corazón de Alma Gamboa Monteserín, una mujer en fuga a la que nadie persigue. Es el invierno de 1946 y Alma viaja a  la casa de sus antepasados donde, en vez de la paz que tanto necesita, le espera, ineludible, una revelación transcendental. 

En el paisaje encuentra una lluvia que no cesa. En ese enigma que es su vida, pronto descubre la fotografía de una joven sin nombre, las ruinas de una mansión devorada por el fuego y un libro misterioso. Nada de eso borra la huella de un amor devastador.

Una heroína tan imperfecta como irresistible que suscitará la complicidad de los lectores. Una novela tan potente, turbadora e hipnótica como un estado de ánimo.



[Biografía y sinopsis facilitadas por la editorial]


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Cuando Teresa Viejo estuvo de promoción por Sevilla con su anterior novela, Que el tiempo nos encuentre, pude asistir al acto de presentación que tuvo lugar en la Librería Beta (puedes informarte del acto aquí). El argumento de aquella novela me resultó interesante como todo lo que contó la autora de aquellos españoles que, temiendo las represalias del bando ganador en la guerra civil, decidieron dejar atrás su vida en España y echar raíces en México. Aquella novela no tuve ocasión de leerla y buenas ganas que tenía pero me he desquitado al zambullirme en su nuevo trabajo, Mientras llueva, que recoge la historia de una familia, los Monteserín, llena de secretos y misterios.

En la Navidad de 1945, Alma Gamboa Monteserín se ha quedado sola a sus veintiséis años. Lucía, su madre, ha fallecido recientemente, mientras que su padre Carlos lo hizo mucho tiempo atrás en trágicas circunstancias. Lo único que le queda en el mundo, que ella sepa, es su novio Damián aunque su relación comienza colear. Alma no tiene más parientes, o eso cree ella, hasta que recibe una llamada de teléfono  de una mujer con la que jamás ha hablado, desde un lugar que no conoce. Eunice, su tía política por parte de madre, al enterarse de la desgraciada muerte de Lucía y advertir que Alma se ha quedado sola, no duda en invitarla a la tierra de la que es oriunda la familia Monteserín, el norte de España. Al principio Lucía no lo tiene claro. Supondría cerrar la farmacia familiar que regenta, hacer la maleta y viajar hacia un lugar al que cree que no le une nada para conocer a algunas personas que ella no siente como su familia. No obstante, y como si el destino se aliara en su favor, Alma opta por aceptar la invitación y abandonar Madrid como única alternativa al dolor que padece, originado no solo por la muerte de su madre sino también por los desaires de Damián.


[Ilustración que abre la novela]


No serán muy acogedoras las tierras que la reciban. Los mares embravecidos del Cantábrico, los cielos plomizos, una llovizna incesante, la enorme casa familiar a la que llaman La Constante y una mansión en ruinas que enseguida despertará su interés serán parte del escenario de recepción. Si los elementos son bastante adversos, las personas que se encuentra a la llegada helarían la sangre a cualquiera. Por un lado, la tía Eunice está ausente. Se ha marchado de viaje junto a Gabriel al que más tarde presentaré. En su lugar queda Refugio, la ama de llaves con pinta de cancerbera de los secretos familiares, tiesa como un palo y déspota como ella sola. Refugio no quiere a Alma en la casa. A esta se une Mario, el chófer de la familia, tremendamente esquivo que únicamente responde a las preguntas de la visitante con evasivas. Y si éramos pocos, por los alrededores merodeará un jardinero al que se le consienten demasiadas libertades.

A pesar de una situación tan desangelada, Alma decide permanecer en la casa a la espera de la llegada de su tía Eunice y en las ocasiones en que puede eludir a Refugio, deambulará por la casa para descubrir los secretos que oculta el pasado familiar, porque de eso trata precisamente esta novela, de indagar en los peculiares acontecimientos de una familia que han derivado en un presente misterioso. Por eso, del presente de la novela, Alma regresará al pasado de su familia con la unión de Alma Ebersbasch y el joven Ventura Monteserín, los abuelos de nuestra protagonista, de cuya unión nacen cuatro hijos: Ventura, Benigno, Fabián y Lucía (madre de la joven). Asentados en aquellas tierras, explotan unas minas de oro a las que los del pueblo no quieren acercarse por motivos supersticiosos. 
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Pero Alma también rescatará su propio pasado, cómo conoció a Damián, cómo murió su padre, qué ocurrió entonces con su madre, cómo era la relación entre ellas. El pasado, siempre el pasado que condiciona nuestro presente hasta llevarnos por caminos inimaginables.

En Mientras llueva el misterio emerge casi desde los umbrales de la novela pues, al margen de las dudas que le surgen a Alma sobre su familia y de las que parece que nadie quiere hablar, a nuestra protagonista le ocurren diversos hechos extraños que la perturban. Por un lado, llega a contemplar desde la ventana de su habitación la figura de una mujer en mitad de la noche, oculta entre las sombras que proyecta la luna sobre el jardín y a eso habría que añadirle la desaparición de un retrato en la biblioteca de la casona, el inquietante mensaje que recibe de una mujer mientras visita una librería, el enigma que gira alrededor de un libro, La rosa amarilla del autor Arutnev Nireset que aportará ciertas dosis de metaliteratura. Y por si todo esto fuera poco, Alma comienza a recibir de manos invisibles múltiples notas redactadas en papel azul que la llegan a enfermar, pues dichas notas solo pueden proceder de una persona y resulta del todo imposible que sea así. 

Como veis, todo lo que rodea a Alma en esas tierras viene cargado de un profundo misterio que aumentará cuando la joven quiera averiguar más sobre la historia de una vieja casa en ruinas en las proximidades de La Constante. Apenas en pie y con visibles signos de haber sido devorada por las llamas, la Provindencia, que así se llama ese montón de piedras, atrae poderosamente la atención de Alma. ¿Quién vivió en esa casa? ¿Qué terrible final tuvo? ¿Vive alguien entre esas paredes?. El pasado es mejor dejarlo enterrado y por lo tanto Refugio le advierte a Alma: 


- El pasado de su familia tiene algunas cosas muy feas. Yo que usted no husmearía en ellas. 


Pero Alma no piensa dejar de remover.

miércoles, 26 de agosto de 2015

GILDA (DRAMA - 1946).


Año: 1946.

Nacionalidad: EE.UU.

Director: Charles Vidor.

Reparto: Rita Hayworth, Glenn Ford, George MacReady, Joseph Calleia, Steven Geray, Rosa Rey, Joseph Sawyer, Gerald Mohr, Mark Roberts, Ludwig Donath, Donald Douglas, Lionel Royce, Saul Martel.

Género: Cine negro. Drama.

Sinopsis: Johnny Farrell (Glenn Ford), un aventurero que vive de hacer trampas en el juego, recala en Buenos Aires. Allí lo saca de un apuro Ballin Mundson, el propietario de un lujoso casino, que acaba haciendo de él su hombre de confianza. Un día, Mundson le presenta a su esposa Gilda. Su sorpresa no tiene límites: fue ella precisamente quien lo convirtió en lo que es, un ser cínico y amargado.

[Información facilitada por Filmaffinity]


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Hablar de Gilda es facilisimo. Es una de esas películas de culto, todo un clásico, de la que la inmensa mayoría de los espectadores guardan en su memoria dos fotogramas y un par de melodías, porque es difícil no pensar en Gilda y no tararear Amado Mío. Con este largometraje me ocurre como con algunas películas de Marilyn Monroe de las que podré olvidar el título pero jamás me olvidaré de un par de escenas míticas.

Gilda es Rita Hayworth, o sería más certero decir que Rita Hayworth es Gilda. Fue uno de los papeles más importantes de su vida, el que la encumbró como mito erótico sin que la hazaña se volviera a producir. Censurada en algunos países,  la película se hizo tan famosa que incluso la imagen de Gilda se colocó en la bomba atómica que Estados Unidos lanzó a modo de prueba sobre las Islas Bikini el mismo año del estreno, 1946.




Pero vayamos al argumento.

Buenos Aires. Johnny Farrell es un granuja que pasa las noches en partidas ilegales de dados donde despluma a sus contrincantes. Es un timador, un tramposo de los bajos fondos que mira con recelo a su alrededor, temeroso de las envidias de sus adversarios. Tanto es así que no descarta ser atacado para despojarlo de sus ganancias y de hecho, el ataque se producirá pero por suerte contará con la ayuda de un caballero, Ballin Mundson, quien lo salva de una más que probable paliza. Mundson le aconseja dejar las calles y acudir a establecimientos donde se juega de verdad, un casino. Y hasta allí se dirige Farrell para poner en práctica sus artimañas y desvalijar la banca, algo que lo conducirá irremediablemente al despacho del dueño del casino, ante el propio Mundson. Ambos llegarán a un acuerdo y Farrell pasará ser hombre de confianza del empresario.

El tiempo pasa y todo marcha sobre ruedas. Farrell prospera a la sombra de Mundson y este siente que la seguridad de su negocio está en buenas manos. Pero nadie dijo que la vida fuera fácil y como si de una macabra burla del destino se tratara, Mundson regresa de un viaje y no lo hará solo. Lo acompaña su nueva y flamante esposa. Gilda, la mujer que hundió a Farrell en el fango, vuelve a aparecer en su vida. Comienza así la trama central de la película pero sería un error calificar Gilda como una película que únicamente se sustenta en el odio y el amor entre un hombre y una mujer. Gilda no es solamente una película de amor y celos. Su argumento toca otros temas como la lealtad y asuntos legales que tienen tanto peso con las cuestiones amorosas. Amor, misterio, celos, suspense, intriga y algún giro argumental conforman este largometraje de obligado visionado.

En relación al reparto, Glenn Ford da vida a Johnny Farrell, un truhán desconfiado y tramposo que vagabundea y trapichea por las calles porteñas sin que sepamos qué lo condujo a esa situación. Por un golpe de suerte, la vida pone en su camino a Mundson y desde ese momento se convertirá en su protector en el sentido más amplio de la palabra. Ford consigue que de sus ojos emane el odio más visceral cuando contempla por primera vez a Gilda ante sus ojos pero sus sentimientos parecen encontrados. No puede evitar repudiar a la mujer que le hizo daño pero su corazón marcará otro ritmo distinto.

Y luego está Rita, la bellísima Rita que cuando rodó esta película contaba con 28 años de edad aunque aparentara unos cuantos más, algo habitual en aquellos tiempos. Como decía al principio de esta reseña Rita es Gilda, la provocadora, sexy, seductora, descarada, coqueta y embaucadora esposa de Mundson y por encima de todo eso, la supersticiosa neoyorquina que no está dispuesta a perder su libertad bajo ningún concepto. Ha sido así siempre y así será. Probablemente la admiración que Gilda despertaba en los hombres es la misma que despertaba la propia Rita, una mujer con raíces españolas y cuyo nombre real era Margarita Carmen Cansino.

Nacida en Nueva York, su padre - Eduardo Cansino- era natural de Castilleja de la Cuesta, un pueblo de Sevilla. Bailarín de profesión, emigró a Estados Unidos donde conoció a Volga Hayworth, bailarina también, ambos formaron el dueto Cansino's Dancing aunque Eduardo terminó por montar espectáculos con su hija cuando esta alcanzó la adolescencia. No parece que la actriz llegara a tener mucha relación con la rama paterna y española de la familia aunque  corre el rumor de que hizo una visita al pueblo, asunto este del que no he podido encontrar ningún testimonio gráfico. Rita Hayworth falleció a los 68 años de edad a causa del Alzheimer que padecía, en su apartamento de Manhattan. Aquí puedes ver un documental muy interesante sobre su vida, desde sus orígenes y sus inicios hasta el momento de su muerte.

En la película, la relación entre Farrell y Gilda discurre en un tira y afloja. Los sentimientos laten bajo una coraza que ambos se colocan, intentando disfrazarlos de aversión. El espectador asiste a esa lucha que comienza con un cruce de miradas en el primer instante en que ambos se reencuentran. No sabremos concretamente qué paso entre ellos en el pasado. Intuiremos que hubo un desprecio, un rechazo, una afrenta pero no se abarcará de manera explícita. En cualquier caso, eso será lo menos porque lo importante es que ninguno de los dos le hace sombra al otro. Sus interpretaciones son electrizantes.



lunes, 24 de agosto de 2015

LA CHICA DEL TREN de Paula Hawkins.



Editorial: Planeta.
Fecha publicación: mayo, 2015.
Nº Páginas: 352.
Precio: 18,90 €
Género: Novela negra y de misterio.
Edición: Tapa blanda con solapas
ISBN: 978-84-08-14342-0
[Disponible en ebooK, 
puedes leer primer capitulo aquí]

Autor

Nacida y criada en Zimbaue, Paula Hawkins se mudó a Londres en 1989, lugar en el que reside desde entonces. Ha trabajado como periodista durante más de quince años, colaborando con una gran variedad de publicaciones y medios de comunicación. 

Sinopsis

¿Estabas en el tren de las 8.04? ¿Viste algo sospechoso? Rachel, sí.

Rachel toma siempre el tren de las 8.04 h. Cada mañana lo mismo: el mismo paisaje, las mismas casas... y la misma parada en la señal roja. Son solo unos segundos, pero le permiten observar a una pareja desayunando tranquilamente en su terraza. Siente que los conoce y se inventa unos nombres para ellos: Jess y Jason. Su vida es perfecta, no como la suya. pero un día ve algo. Sucede muy deprisa, pero es suficiente. ¿Y si Jess y Jason no son tan felices como ella cree? ¿Y si nada es lo que parece?

Tú no la conoces. Ella a ti, sí. 

[Biografía y sinopsis tomadas directamente del ejemplar]


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«Una por la pena, dos por la alegría, tres por una chica».

Con esta nana tradicional relacionada con las superticiones que giran alrededor de las urracas en algunas culturas, se inicia La chica del tren de Paula Hawkings, una novela que se ha convertido en fenómeno editorial este verano con más de tres millones de lectores en todo el mundo, convirtiéndose así en el best-seller más vendido en EE.UU y Reino Unido.

La chica del tren cuenta con una estructura a modo de diario, con la peculiaridad de que no solo oiremos una única voz, sino tres, la de tres mujeres que, de un modo u otro, guardan una relación entre ellas. La trama se construye con los pensamientos, recuerdos y hechos de estas tres mujeres (Rachel, Megan y Anna) como si de un rompecabezas se tratara. Cada una aporta una parte de la historia y el lector tendrá que ir colocando las piezas en su lugar. 

Conozcamos a los personajes principales.

Rachel

Rachel es una chica que realiza el trayecto Ashbury - Londres cada mañana en el tren de las 8.04 para regresar en el de las 17.56. Desde el primer momento tendremos la certeza de que no anda bien. Sus pensamientos y el hecho de que beba en el tren, ligeramente a escondidas del resto de los viajeros, nos hacen pensar que Rachel tiene algún problema de peso. El mayor de todos ellos, el que la ha convertido en lo que es, tiene como centro neurálgico a su exmarido Tom, del que se divorció hace ya dos años. Rachel no ha podido superarlo. Con una narración que se desplaza al pasado conoceremos los motivos que dieron pie al divorcio, acontecimiento que supuso su declive hasta convertirse en un despojo de sí misma.



En sus desplazamientos, Rachel contempla la vida a través de las ventanillas del tren. A lo largo del recorrido puede observar las viviendas colindantes a la vía, a sus habitantes desayunando en el jardín a los que su imaginación les construirá una vida feliz, plena y satisfactoria, alejada de todo tipo de problemas. Ella sueña con conseguir algo así, o mejor dicho, echa de menos la vida que tuvo. Y entre sueño y sueño, cada mañana su mirada se tropezará forzosamente con otra imagen que le abrirá de nuevo sus heridas.  Y así van pasando sus días, entre trayectos de tren, recuerdos y gin-tonics premezclados,... siempre pensando en su pasado, echándolo de menos y sintiéndose cada vez más hundida. No obstante algo ocurrirá que cambiará su vida por completo. Desde la misma ventanilla del mismo tren en el que viaja todas las mañanas, Rachel observará algo curioso, una visión que le parecerá inquietante y que la enfadará muchísimo. Más tarde vinculará su visión a otro hecho que convulsiona a la pequeña comunidad, un asunto que dará sentido a toda la novela. Gracias a un acúmulo de coincidencias y a que una mañana despierta llena de moratones, con sangre en el labio y una herida en la cabeza, Rachel se verá implicada en una situación que supondrá el despertar de su profundo letargo. Por fin, después de tanto rechazo, se siente útil y con una meta por la que levantarse cada día.


Megan

La segunda voz de la novela será Megan. Ama de casa y casada con Scott, echa muchísimo de menos su vida anterior, cuando trabajaba como marchante en una galería de arte de su propiedad. Por desgracia el negocio fracasó y no tuvo más remedio que cerrar y regresar a sus labores en casa, pero el techo se le cae encima. Megan tiene inquietudes, aspiraciones, pasa demasiadas horas sola y el papel de esposa la asfixia, así que intenta encontrar otra ocupación y durante un tiempo se encargará de cuidar al hijo de una vecina.

Megan es otro personaje con lastre. Al margen de su desplome profesional también arrastra un episodio triste del pasado que marcará extremadamente su presente. Sufre bajones emocionales, ataques de pánico, ansiedad, insomnio,...  que la conducen a la consulta de un psicoanalista por indicación de su marido. Aparentemente todo mejorará. Aparentemente.

Anna

Es la tercera voz y la que parece tener una vida más placentera y estable. Está casada y acaba de tener a su primera hija. La pequeña Eve ocupa todo su tiempo a la vez que inhunda su corazón de felicidad. Se podría decir que la familia de Anna es perfecta. Un marido que la quiere, una hija adorable, una casa preciosa aunque ella hubiera preferido vivir en otro lugar. Sin embargo, la perfección no existe y algo, o mejor dicho, alguien enturbia la felicidad del matrimonio, asusta a Anna, la incomoda y la perturba.

Su aparición en la novela será más tardía que la del resto de los personajes y existe una lógica justificación para ello.  

Y más allá de estas tres mujeres, otros personajes: el psicoanalista de Megan, su marido Scott, el marido de Anna y un hombre pelirrojo de identidad desconocida que aportará tensión al argumento. 


viernes, 21 de agosto de 2015

AMAPOLA 15 de Carmen de la Rosa.


Editorial: Círculo Rojo.
Fecha publicación: marzo, 2015.
Nº Páginas: 246.
Precio: 15,00 €
Género: Narrativa.
Edición: Tapa blanda con solapas.
ISBN: 978-84-9095-626-7

Autora

Carmen de la Rosa nació en Sevilla, en una familia de la burguesía rural. Fue ama de casa hasta que, con 40 años, se licenció en Periodismo por la Universidad Complutense. Realizó dos años de Doctorado y un curso de Relaciones Internacionales en el Instituto Ortega y Gasset de Madrid. Antes, en Almería, había obtenido la licencia de piloto privado, y el título de profesora de danza española en el Conservatorio de Murcia.

Desde hace una década trabaja en GoYa!, su propia agencia de publicidad ubicada en la ciudad alemana de Heidelberg, donde también es chef de cocina después de estudiar gastronomía en Le Cordon Bleu de Londres.

Publico El Al Mizar en 2011 (Editorial Almuzara), El Inglés de Serrón (Círculo Rojo, 2012), La carta de Lucrecia (Editorial Anantes, 2014) y el libro de cuentos infantiles ¡Arre, burro, arre! (Los libros de Umsaloua, 2014) presentado en la Fundación Zebonia-Juan Ramón Jiménez en el Año de Platero. Tiene escrita una novela inédita, junto con veinte relatos y siete cuentos infantiles.

Carmen de la Rosa ha vivido en Sevilla, Almería, Madrid, Londres, Múnich, Hamburgo, Dusseldorf y Heidelberg.

Sinopsis

Reina Margarita vuelve a su antigua casa de Amapola 15 para tranquilizar su espíritu y recobrar la paz. Allí desea reencontrarse con los recuerdos de una tarde de enero de hace veinte años: cuando llegó a Madrid dispuesta a cumplir sus sueños; cuando Reina Margarita, en contra de la voluntad de su madre, abandonó su puesto de charcutera e Jaén para estudiar Periodismo en la capital.

Durante la primera noche de su nueva vida como sirvienta, una anciana es asesinada en un edificio cercano. Involucrada en la investigación para descubrir al culpable, Reina Margarita duda entre dos vocaciones: llegar a ser reportera de prensa del corazón o convertirse en policía. Pero debido a los hechos estrambóticos que se suceden en el piso de la calle Amapola 15, y por su especial relación con doña Aurora y las cuatro estudiantes que conviven en la casa, la vida de Reina Margarita toma un nuevo rumbo.

Carmen de la Rosa, con la prosa fresca y sencilla de El Al Mizar, ha escrito una emocionante historia de mujeres optimistas y luchadoras, inspirada en hechos reales de su propia biografía.

Amapola 15 es una deliciosa novela de aprendizaje, repleta de una intriga al estilo de Agatha Christie, con episodios de humor y un asombroso desenlace. Es divertida y conmovedora. Su Reina Margarita canta, ríe, baila, ama, llora y vive intensamente la vida, como nos aconsejó el gran Chaplin. 

[Biografía y sinopsis tomadas directamente del ejemplar]


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Supe de la existencia de la autora Carmen de la Rosa a través de la editorial Anantes, cuando allá por el mes de mayo del año pasado, publicaron su anterior novela, La carta de Lucrecia. La presentación de aquel libro, en un marco incomparable, me dejó sumamente sorprendida (puedes leer sobre aquel acto aquí), así como todo lo que se habló de la novela. Aunque mi intención inicial fue leerla, acercarme a aquella cantaora de flamenco que un día recibe una carta de su abuela dando pie al desvelo de secretos, una cosa me llevó a otra y al final, aquella lectura quedó en el aire pero con ganas de conocer el estilo de esta autora, pues todos los que tuvísteis oportunidad de leer su novela, coincidíais en las buenas impresiones. Así que, cuando Carmen se puso en contacto conmigo anunciándome su nueva publicacion, Amapola 15, no me lo pensé dos veces.

Antes de entrar en materia me gustaría hacer una puntualización. Amapola 15 se publica bajo el sello de Círculo Rojo, una editorial de la que muchos receláis (o recelamos) pues, como a veces hemos comentado, algunos libros de Círculo Rojo vienen con errores ortográficos o de puntuación, mal maquetados, con lapsus en la sintáxis y/o en la gramática,... detalles que a veces hacen muy cuesta arriba la lectura. Creo no equivocarme (corregidme si no es así)  que Círculo Rojo no revisa las obras que publica, ni cuentan con editores ni correctores de estilo, sino que los manuscritos ven la luz tal y como se entregan a la editoral. Pues bien, en este sentido, nada hay que temer con Amapola 15. Carmen de la Rosa peca de cuidadosa a la hora de presentar una novela sin mácula. Por lo tanto, aclarado esto, vayamos al grano.

Amapola 15 narra las vivencias de unas mujeres que residen en un inmueble madrileño. Se trata de una residencia de estudiantes o colegio mayor regentado por doña Aurora. Hasta allí llegará nuestra principal protagonista y voz narradora, Reina Margarita, procedente de Jáen, donde trabajaba en un supermercado, e hija de Rosana, una mujer nacida en Ahuachapán (El Salvador), inmigrante que no lo ha tenido fácil, luchadora, que ejerce de portera en un edificio mientras que en sus ratos libres vende lencería fina por catálogo a domicilio y presta su fe a la Iglesia Esotérica del Pentecotés del Último Día. 

Reina Margarita está cansada de vivir en provincias y de trabajar en el Pryca. Tiene aspiraciones, sueños, anhelos,...  así que, con esa gran determinación que la caracteriza y sus veinticuatro años, hace el hatillo y se va a Madrid porque quiere estudiar periodismo. Y como hasta la fecha nadie ha inventado la manera de vivir del aire, Reina no tendrá más remedio que buscar trabajo y terminará por recalar en Amapola 15 (a todo esto, es el nombre y el número de la calle en la que se ubica el inmueble) como asistente interna para poder mantenerse y pagarse los estudios. 

Nada más poner un pie en la residencia, Reina tiene conocimiento de un trágico suceso que ha conmocionado al barrio. Doña Rita, una vecina de la calle Rincones con la que comparten patio interior, ha sido hallada muerta en su domilicio. A todas luces parece asesinada siendo el móvil económico la razón de este asesinato, pues la caja fuerte ha sido desvalijada. A Reina, que aún no tiene claro si convertirse en periodista de investigación o policía, este luctuoso hecho le parece de lo más emocionante y una vez que termina por instalarse y de establecer los primeros contactos con las estudiantes de la residencia, se embarca en una investigación exhaustiva con sus nuevas amistades, al margen de la oficial que lleva a cabo la policía, intentando enterarse de los detalles del asesinato y haciendo conjeturas sobre los distintos sospechosos: Fidel -el sobrino de la finada-, un yonqui que deambula por la zona, don Benigno -un vecino de doña Rita-, unos rumanos,... 

Con la información que os acabo de dar, cualquier lector podría pensar que Amapola 15 es una novela policíaca pues hay un asesinato, una investigación policíaca, otra paralela que emprende Reina y sus amigas, unos sospechosos,... pero realmente el asesinato es un asunto colateral que se potencia lo justo para dar pie al verdadero argumento de la novela, las relaciones personales que se establecen entre todos los habitantes de Amapola 15, un inmueble con una distribución tal que así: 


«El bajo estaba alquilado a la floristería Amapolas, la primera planta eran oficinas, en la segunda vivía la abuela (Doña Rosario), en la tercera Josele (familiar mexicano de doña Rosario), la cuarta y quinta correspondían al dúplex que se quedó mi jefa tras el divorcio (la residencia de doña Aurora, donde también residen Chelo y las estudiantes Lali, Marta y Olivia), y la sexta era el apeadero que tenía el misionero cuando de tarde en tarde aparecía en Madrid para visitar a su anciana madre. En ese apartamentillo viví yo (Reina)». [pág. 54]



Reina, en su primera persona, no solo nos hablará de sí misma sino que gracias a su voz, también conoceremos al resto de los personajes de los que os hablaré más adelante, curiosamente casi todos femeninos. ¿Es una novela coral entonces? Sí, lo es pero incluso se podría ir más lejos a la hora de etiquetarla. Y es que, mientras leía esta novela corta me ocurrió algo muy curioso. Página tras página, personaje tras personaje, empecé a rememorar y a recordar lo que siempre me han contado de los corrales de vecinos de mi tierra, esas comunidades que se constituían en torno a un patio central donde los habitantes del inmueble hacían su vida. Generalmente no existían lazos de sangre entre unas familias y otras pero aún así, la unión que los ataba era tan fuerte que parecían abuelos, nietos, primos, hermanos, tíos,... Todos lloraban por las desdichas de todos y las alegrías se celebraban en común. Iban todos a una, en pelotón, lo mismo que les ocurre a Reina, Aurora, Rosario, Chelo, Marta, Olivia,... , algo que cuesta mucho encontrar a día de hoy. Me ha parecido preciosa las conexiones que Carmen de la Rosa ha trenzado entre los personajes de esta novela, algo que prácticamente ha pasado a ser inexistente. 

Y de las relaciones de amistad pasaremos a las relaciones amorosas porque el amor también tiene cabida en Amapola 15. Algunos personajes se enamorarán y vivirán encuentros a escondidas, otros sufrirán por amor, sentirán celos, se desesperarán,... Pero, en cualquier caso, el asesinato seguirá estando ahí y tendrá su parte de importancia, tanto es así que ya en las primeras páginas se nos advierte que van a ocurrir ciertos sucesos extraños.


«Sí, desde luego que me acostumbre [...] a todos los extraños sucesos que ocurrieron en el tiempo que viví en Amapola 15». [pág. 16]

Pero insisto en que los personajes y sus relaciones ostentan el mayor peso de la novela y para conocerlos bien, la autora se detiene en describir con detalle a los habitantes de la residencia, a los que presenta sin excederse en demasía con puntualizaciones insignificantes. La información que se nos ofrece es la justa sobre sus vidas, sus hábitos y costumbres para que el lector los conozca sin atosigarle.

miércoles, 19 de agosto de 2015

FELICES 140 (DRAMA - 2015).

 

Año: 2015

Nacionalidad: Española.

Director: Gracia Querejeta

Reparto: Maribel Verdú, Antonio de la Torre, Eduard Fernández, Marian Álvarez, Nora Navas, Alex O'Dogherty, Ginés García Millán, Paula Cancio, Marcos Ruiz.

Género: Drama.

Sinopsis: Elia cumple 40 años y, para celebrarlo, reúne en una lujosa casa rural a amigos y familiares. Tiene que decirles algo muy importante: es la ganadora del bote de 140 millones que el Euromillón sorteaba esa semana. A partir de ese momento el ambiente empieza a enrarecerse, y lo que al principio parecía alegría compartida da paso enseguida a toda clase de argucias para intentar quedarse con el dinero de la afortunada.

[Información facilitada por Filmaffinity]


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Todos los años sueño que me toca la lotería de Navidad. No un tercer, cuarto o quinto premio, no, no, yo voy a por los premios grandes, a por el gordo. Y cada año hago mis cábalas, y pienso en qué me gastaría ese dineral que la diosa Fortuna ha tenido a bien enviarme. Lo primero, pagaría mi hipoteca que me supone un lastre mensual, quizás me compraría un coche nuevo aunque no es algo que me atraiga especialmente, viajaría a todos esos lugares que hoy no me puedo permitir, renovaría por completo mi casa actual en la que me siento bien,... y ayudaría a los míos, a todos por igual. Creo que lo que más ilusión me haría sería comunicárselo a mi familia, ver sus caras de inmensa alegría al decirles que «¡¡nos ha tocado la lotería!!» y sentir cómo respiran un poco más aliviados al dejar atrás la losa de sus deudas. Obviamente, cada año el sueño se torna en frustración cuando a eso de las 14 horas del 22 de diciembre, no aparezco en televisión saltando de alegría con una botella de champán en la mano. Y entonces llegan los falsos consuelos: «El dinero no da la felicidad» (pero digo yo que algo ayudará, ¿no?), «Los millonarios de otros años han terminado sin un duro y con más deudas que antes» (bueno, pero alguno habrá que haya sabido invertir bien y tenga la vida resuelta para siempre, ¿no?), «El dinero termina por deshumanizar al individuo» (¿en serio? pero si ya hay mucho deshumanizado que no tiene donde caerse muerto). Y es que dicen que el dinero solo trae disgustos, que las familias se rompen, que uno pierde los papeles y que al final, hasta te arrepientes de que te haya tocado la lotería. No es un argumento que me convenza pero desde luego, a los personajes de esta película el dinero les ha sentado muy mal. 

La vida de Elia ha cambiado radicalmente tras resultar ganadora de un premio de 140 millones de euros en el Euromillones. Nadie lo sabe. De hecho los medios de comunicación están buscando al agraciado. Aprovechando que va a cumplir 40 años, decide celebrar ambas noticias en compañía de los que más quiere. Para ello, organizará un fin de semana en una casa rural, en un paraje aislado y recóndito donde, a gastos pagados, llegarán su hermana Cati, casada con Juan y madre de Bruno y sus amigos Polo, Mario, Martina y Ramón. A la fiesta llega una invitada que ella no esperaba, Claudia, la nueva novia de Mario.

Todos están muy sorprendidos por el excesivo derroche de Elia al organizar una fin de semana así, tan solo por cumplir 40 años pero también están contentos. Son amigos desde que eran pequeños y hace más de un año que no se veían. Para ponerse un poco al día, dedicen contarse en la cena de la primera noche qué es lo mejor que les ha pasado a cada uno. Entre tensiones livianas y tiranteces camufladas de halagos esto es lo que cuenta cada uno:

- Juan (Antonio de la Torre), el cuñado de Elia y abogado de profesión cuenta que ha ganado un juicio de los complicados, de esos que ni por asomo pensabas que te iba a salir bien, algo que le ha supuesto mucho prestigio en el bufete en el que trabaja pero no lo suficiente como para que lo nombren socio.

- Polo (Alex O'Dogherty) es millonario. Procedente de familia pobre, llegó al dinero y al éxito de la manera más tonta y ahora ha pegado el pelotazo de su vida al hacer negocios con un chino.

Ramón (Eduard Fernández) y Martina (Nora Navas) están casados y regentan un restaurante familiar. El negocio les va a las mil maravillas y encima su felicidad se ve engrandecida por la llegada de su primer hijo. Todos reciben la noticia del embarazo de Martina con gran entusiasmo.

- Mario (Ginés García Millán) y Claudia (Paula Cancio) son pareja. Ella es una actriz argentina con un gran futuro por delante mientras que Mario es un magnífico pianista. La vida les sonríe y han decidido sellar su amor con el matrimonio.

- Bruno (Marcos Ruiz) recuerda con entusiamo el viaje que hizo con su tía Elia a un parque temático. Adora a su tía no solo por eso sino porque para él, ella es perfecta. 

- Cati (Marián Álvarez) no aporta nada a la reunión. En su lugar, se levanta de la mesa con ofuscación dejando tras de sí un aliento de incomodidad.

- Pero llega el el turno de Elia, el momento de comunicar a los demás que le ha tocado 140 millones de euros. Al principio ninguno da crédito pero al final tienen que rendirse a la evidencia.  



La noticia provoca un aluvión de acontecimientos. Los 140 millones darán lugar a que se descorra el telón del teatrillo que hasta ahora habían ejecutado estos amigos, dando paso a las bambalinas, donde veremos la verdadera identidad de cada uno de los personajes. Todo lo que han dejado ver de sí mismos hasta este momento es una burda mentira que intentarán enmendar movidos por la nueva situación de Elia. Cada uno de ellos tiene algo que ocultar, una verdad muy distinta a la que han contado y la situación se complicará aún más cuando ocurra el hecho de extrema gravedad que dejará ver la miseria que esconden todos ellos y que pondrá en tela de juicio el valor de la amistad.


En el primer tercio del largometraje, mientras toda la acción se va desarrollando, se intercalan escenas individuales de cada uno de los personajes. Parece otro momento futuro al presente de la película en el que cuentan cómo les ha cambiado la vida al haber sido agraciados con tanto dinero. En un principio, es posible que no comprendamos dónde encajar todas esas escenas pero es algo que se aclara en el desenlace.


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